Un giro inesperado en el mundo del cibercrimen ha dejado a todos sorprendidos. Un grupo de presos en Argentina, en lugar de aprovecharse de un hackeo a un teléfono celular, decidió utilizar la información obtenida para desenmascarar una infidelidad.
La historia, que se ha vuelto viral en redes sociales, fue compartida por la propia víctima de la infidelidad, Florencia Maidana, quien utilizó su cuenta de X (antes Twitter) para relatar los hechos. Según su relato, los presos lograron acceder al WhatsApp de su expareja y, al descubrir sus múltiples infidelidades, decidieron contactarla para revelarle la verdad.
«Los presos le hackearon el WhatsApp a mi ex, me llamaron y me dijeron con quién me fue infiel», escribió Maidana en su publicación, que rápidamente se llenó de comentarios y reacciones.
¿Cómo ocurrió todo?
Al parecer, los presos, que inicialmente tenían intenciones de cometer algún tipo de delito utilizando el acceso al WhatsApp de la víctima, se toparon con una gran cantidad de conversaciones comprometedoras que evidenciaban la infidelidad del hombre.
Decididos a hacer justicia, los reclusos se pusieron en contacto con Maidana y le proporcionaron pruebas contundentes, como capturas de pantalla de conversaciones con otras mujeres, fotos y hasta detalles de encuentros clandestinos.
Este caso ha generado un gran debate en redes sociales, con usuarios que se muestran sorprendidos por la actitud de los presos y por el giro inesperado de los hechos. Muchos han aplaudido la valentía de Maidana al compartir su historia y han destacado la importancia de denunciar este tipo de situaciones.
Sin embargo, otros usuarios han cuestionado la legalidad de las acciones de los presos y han planteado interrogantes sobre las posibles consecuencias legales que podrían enfrentar.
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