La doctora Ana Josefa García Cuello, acusada de asesinar a su hija de 6 años, sorprendió este domingo al atribuir el crimen a la posesión de un «espíritu maligno». Durante una breve declaración a la prensa, la imputada aseguró estar orando con sus hijos momentos antes del trágico suceso y haber experimentado un sueño perturbador.
«Me dijeron que supuestamente yo le llevé la cabeza a mi hija y yo estoy aquí para que se esclarezca todo esto», expresó García Cuello, quien se declaró una ferviente cristiana incapaz de dañar a su propia hija.
Sin embargo, el Ministerio Público sostiene una acusación formal por homicidio con premeditación y asechanza, basándose en pruebas que aún no han sido reveladas públicamente. La Oficina de Atención Permanente, también dio a conocer este domingo la solicitud de medida de coerción en contra de la acusada queda aplacada para el martes.
Paralelamente, García Cuello denunció maltratos por parte de la seguridad penitenciaria durante su traslado al Palacio de Justicia, incluyendo falta de aire acondicionado y esposas ajustadas.
Este caso ha conmocionado a la sociedad dominicana, generando un intenso debate sobre la salud mental, la violencia infantil y la influencia de creencias religiosas en este tipo de crímenes.
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