Mauricio Funes, ex-presidente de El Salvador, ha sido condenado a ocho años de prisión por un tribunal salvadoreño por lavado de dinero, relacionado con la adjudicación de un contrato de construcción de un puente a una empresa guatemalteca a cambio de un avión.
Funes, quien se encuentra asilado en Nicaragua y protegido por el gobierno de Daniel Ortega, enfrenta siete procesos penales, dos de los cuales ya han resultado en condenas.
Debe devolver más de 400,000 dólares
La fiscalía salvadoreña comunicó que Funes favoreció a la empresa guatemalteca en la construcción del puente San Isidro sobre el Río Lempa. Este caso se suma a otros en los que Funes ha sido condenado, incluyendo una sentencia de 14 años por negociar con pandillas y otra por enriquecimiento ilícito, donde debe devolver más de 400,000 dólares.
La acusación sostiene que Funes entregó el proyecto de diseño y construcción del puente en 2013 por un valor de 8.4 millones de dólares y, a cambio, recibió un avión modelo King Air TG ADL. El empresario José Miguel Menéndez, alias “Mecafé”, también fue condenado a ocho años de prisión en relación con este caso.
La reforma penal aprobada en septiembre de 2022 permite juicios en ausencia, lo que ha facilitado el proceso contra Funes. Además de este caso, el exmandatario enfrenta acusaciones por desvío de fondos públicos y sobornos durante su presidencia bajo el FMLN.
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