Sarah Vincent, embarazada de 39 semanas, se disponía a disfrutar de una tarde de cine con su familia cuando la vida le deparó una sorpresa inolvidable. En medio de la oscuridad de la sala, y para asombro de todos los presentes, Sarah dio a luz a una preciosa niña.
Lo que comenzó como una tarde de entretenimiento se convirtió en un momento lleno de emociones y adrenalina. A los 20 minutos de iniciada la película, Sarah comenzó a sentir molestias y, al darse cuenta de que estaba a punto de dar a luz, pidió ayuda al personal del cine. Con la calma y profesionalismo que caracteriza a los héroes de la vida real, los empleados del Cineworld Unlimited de Cardiff se convirtieron en improvisados parteros, asistiendo a Sarah y dando la bienvenida a la pequeña Lowri al mundo.
«Fue una experiencia surrealista», confesó Sarah a los medios locales. «Nunca imaginé que daría a luz en un cine, pero el personal fue increíblemente amable y me hizo sentir muy segura».
Para celebrar este acontecimiento tan especial, el cine ha decidido obsequiar a Lowri con un regalo único: una membresía gratuita de por vida. «Queremos que Lowri siempre se sienta como en casa en nuestros cines», afirmó el director general de Cineworld. «Este es nuestro pequeño homenaje a una nueva cinéfila que llegó al mundo de una manera tan original».
La historia de Sarah y Lowri se ha vuelto viral en Gales, inspirando a miles de personas con su ternura y demostrando que la vida a veces nos sorprende con momentos mágicos y llenos de esperanza.
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