El primer ministro de Haití, Garry Conille, ha emitido un mensaje urgente a la población en relación al huracán Beryl, que se acerca al país. En su comunicado, Conille insta a los ciudadanos a seguir los consejos de las autoridades de socorro y a tomar medidas preventivas.
En la región de Grand Sud, se aconseja evitar viajar a menos que sea absolutamente necesario y no aventurarse en el mar. La Protección Civil ha proporcionado directrices específicas para mantenerse seguros durante el paso del huracán.
Conille, quien se encuentra en Washington en una visita oficial, expresó su preocupación por la situación y pidió a todos que colaboren para evitar accidentes. Aunque confía en que saldrán adelante, enfatizó la importancia de seguir las recomendaciones de las autoridades.
El nivel de alerta amarilla indica un riesgo significativo de daños causados por el ciclón. Conille está en contacto regular con el Ministerio del Interior y ha movilizado a todas las partes del Gobierno para brindar asistencia en caso necesario.
Además, el primer ministro ha sostenido reuniones con funcionarios de instituciones financieras internacionales en Washington, incluyendo el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Interamericano de Desarrollo.
Beryl, como cualquier ciclón, presenta peligros potenciales, como fuertes vientos de hasta 250 kilómetros por hora, lluvias torrenciales y grandes olas. Se pronostican fuertes lluvias en el Gran Sur de Haití, y ya se han observado ráfagas de viento en el área metropolitana de Puerto Príncipe.
El país ha declarado el nivel de alerta amarilla en todo su territorio debido al riesgo de inundaciones, deslizamientos de tierra y vientos intensos asociados al huracán. Los departamentos del sur son especialmente vulnerables.
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